El presidente argentino tenía planeado visitar el país norteamericano para participar en la cumbre de la Conferencia de Acción Política Conservadora.
El presidente argentino Javier Milei finalmente canceló su viaje a México donde tenía previsto participar de la cumbre de la Conferencia de Acción Política Conservadora. El rumor se mantuvo parte del día, después que el vocero presidencial, Manuel Adorni colocó en su estado de WhatsApp, que la nueva gira no estaba confirmada.
Se trataba del viaje número 14 desde que el líder libertario asumió la jefatura de Estado y su tercera participación en un foro de esta organización. Se había adelantado una posible agenda de entrevistas con empresarios, al tiempo que se había descartado un posible encuentro con el presidente local, Andrés Manuel López Obrador.
En cambio, desde la organización apostaban a una reunión con el actor, productor y exaspirante a candidato presidencial Eduardo Verástegui.
Finalmente fue el mismo Adorni quien confirmó que Milei tiene otra actividad prevista para el viernes: formará parte del aniversario 140° de la Bolsa de Comercio de Rosario.
De haberse concretado, la invitación al acto que se realizara en el barrio de Polanco de la capital azteca, hubiera significado la tercera participación de Milei en la CPAC, la conferencia política que se considera uno de los escenarios que motorizan la candidatura presidencial Donald Trump.
La visita a Brasil y la que podría haberse concretado esta semana a México tienen un punto en común y es el rechazo que han mostrado los actuales mandatarios de esos países a la visita de Milei para la participación en los mítines conservadores.
No es la primera vez que López Obrador reniega del líder argentino. El año pasado, durante una de sus habituales conferencias de prensa mañaneras, había criticado a Milei por afirmar que el Papa Francisco era “el representante del maligno en la Tierra”.
La presencia del titular de la Casa Rosada en reuniones conservadoras también generó otros cortocircuitos, el más reciente con España que, luego del entredicho con el líder socialista Pedro Sánchez, incluyó el deterioro de las reacciones diplomáticas entre los países.
