Miles de colombianos se vieron obligados a caminar hasta el trabajo, cuando los camioneros de las principales ciudades bloquearon las carreteras para protestar por el reciente aumento del precio del combustible diésel.
Los sindicatos de camioneros han dicho que los planes del gobierno para eliminar los subsidios al combustible diésel llevarían a sus empresas al borde de la quiebra, mientras que la administración del presidente izquierdista Gustavo Petro sostiene que debe eliminar gradualmente los subsidios para reducir un creciente déficit presupuestario y destinar más fondos a la educación y la salud.
El gobierno aumentó el precio del combustible diésel alrededor de $ 2,90 por galón, un aumento de 50 centavos, luego de numerosas reuniones con los sindicatos de camioneros.
En respuesta, los sindicatos han estado realizando protestas en todo el país, que se intensificaron el martes, con bloqueos de carreteras en las ciudades de Bogotá, Medellín y Cali, que han disminuido la cantidad de alimentos que llegan a los mercados mayoristas.
Petro escribió en la plataforma de redes sociales X que no permitiría que los sindicatos de camioneros bloqueen el país. El ex activista, que ha liderado numerosas protestas a lo largo de su carrera, escribió el martes que los subsidios al combustible tenían que ser eliminados para reducir la deuda pública y financiar la salud y la educación de los colombianos.
Los subsidios al combustible diésel se han implementado en Colombia durante décadas, y los gobiernos anteriores los han mantenido en su lugar, por temor a que una eliminación pudiera conducir a protestas masivas y aumentos en los precios de los alimentos.
Según el Ministerio de Finanzas de Colombia, los subsidios al combustible diésel le cuestan al gobierno colombiano alrededor de $ 240 millones cada mes pagados a la petrolera estatal Ecopetrol.
Algunos economistas colombianos han sugerido que Ecopetrol venda su combustible diésel a un precio más bajo dentro del país, pero eso reduciría profundamente los márgenes de la empresa y afectaría a los accionistas de Ecopetrol, que también cotiza en la Bolsa de Valores de Nueva York.
El gobierno dice que está planeando eliminar los subsidios al combustible diésel en tres etapas para permitir que las empresas de transporte planifiquen el aumento de los precios.
Sin embargo, los funcionarios han dicho que están dispuestos a reunirse con los sindicatos de camioneros para discutir formas de compensarlos por sus mayores costos operativos.