Un autobús que transportaba a los invitados a una boda se precipitó a toda velocidad por un barranco en el suroeste de Pakistán, matando al menos a siete personas, según informaron las autoridades y los equipos de rescate.
La causa del accidente cerca de Quetta, la capital de la agitada provincia de Baluchistán, no se conoció de inmediato. Se está llevando a cabo una investigación.
Según Wasim Baig, portavoz del departamento de salud, los cuerpos de las víctimas y 17 personas que resultaron heridas en el accidente fueron trasladados a un hospital local. Se dijo que algunos de los heridos se encontraban en estado crítico.
Los accidentes de tráfico son habituales en Pakistán, donde las carreteras y autopistas están mal mantenidas y las leyes de tráfico son ampliamente ignoradas.
En agosto, 32 personas murieron en dos accidentes de autobús, uno en Baluchistán y el otro en la provincia oriental de Punjab. Las autoridades dijeron en ese momento que ambos accidentes fueron causados por la negligencia de los conductores.
Y a principios de agosto, 28 peregrinos paquistaníes murieron en un accidente de autobús en el vecino Irán mientras se dirigían a Irak.