Un tribunal de la ciudad sudanesa de Omdurmán condenó a tres hombres de 22, 24 y 26 años a que les amputen la mano derecha tras declararlos culpables de robar 52 cilindros de gas en julio de 2021.
La sentencia, dictaminada el pasado 31 de enero, también prevé tres años de cárcel para cada uno y los obliga a pagar una multa equivalente a 3.500 dólares en concepto de indemnización al demandante.
Los hombres fueron arrestados por la Policía el 2 de octubre de 2022 junto con otros sospechosos. Los demás fueron acusados de haber recibido dinero robado. Dos de ellos tendrán que pasar dos años en la cárcel y pagar una multa equivalente a 1.750 dólares, mientras que el sexto únicamente deberá pagar la multa.
El pasado jueves, el Centro Africano para Estudios de Justicia y Paz (ACJPS, por sus siglas en inglés) instó a las autoridades sudanesas a anular la condena de amputación de los tres acusados y a garantizar un proceso judicial justo para ellos. La ONG recordó que durante el juicio los hombres no tenían defensa legal, no se les explicó la gravedad de los delitos imputados y las penas que acarrean, al tiempo que la única evidencia en su contra en la que el juez basó su veredicto fueron las confesiones escuchadas.
La amputación de las extremidades se incorporó en la legislación sudanesa como forma de castigo corporal en septiembre de 1983, en medio de las reformas islámicas. “Sin embargo, como Estado signatario de tratados internacionales y regionales que prohíben la tortura y otros tratos o castigos crueles, inhumanos o degradantes, las amputaciones como forma de tortura sancionada por el Estado constituyen una violación de las obligaciones de Sudán en materia de los derechos humanos”, subraya ACJPS.