Las autoridades paquistaníes introdujeron clínicas móviles y agregaron más camas en los hospitales para tratar a los casi 70.000 pacientes que reciben diariamente con enfermedades relacionadas con las vías respiratorias, mientras el peligroso smog sigue envolviendo el este del país, dijeron funcionarios el miércoles.
Punjab, la provincia más poblada de Pakistán con 127 millones de habitantes, ha sido golpeada por una ola de contaminación récord desde octubre. La agencia de la ONU para la infancia advirtió el lunes que la salud de 11 millones de niños allí estaba en riesgo.
Lahore y Multan, las dos principales ciudades de la provincia afectadas por el smog, seguían siendo las dos ciudades más contaminadas del mundo el miércoles, con lecturas del índice de calidad del aire de aproximadamente 400, según el Departamento de Protección Ambiental. Cualquier valor por encima de 300 se considera peligroso para la salud.
Según los expertos, el peligroso smog es un subproducto de la gran cantidad de vehículos, de las obras de construcción e industriales, así como de la quema de cultivos al comienzo de la temporada de siembra de trigo de invierno.
Mientras tanto, más de 200 clínicas a bordo de vehículos han estado recorriendo la provincia de Punjab, afectada por el smog, desde la semana pasada en busca de personas que no pueden pagar el tratamiento y de ancianos que no pueden llegar a los hospitales, dijo Aun Abbas, un alto funcionario del gobierno del Departamento de Salud.
Abbas dijo que las clínicas móviles están equipadas para realizar pruebas de laboratorio básicas y que los médicos a bordo pueden recetar medicamentos según sea necesario.
Uzma Bukhari, portavoz del gobierno provincial de Punjab, dijo que hasta ahora se ha tratado a más de 2,1 millones de pacientes afectados por el smog en hospitales estatales, y agregó que se espera que el número aumente.
Se ha ordenado el cierre de las escuelas de la provincia hasta el 17 de noviembre para proteger a los niños, y de todos los parques y museos hasta el 18 de noviembre. Los médicos han instado a la población a evitar viajes innecesarios y a utilizar mascarillas.
Los pacientes con asma parecen ser los que más sufren, ya que tienen dificultades para respirar incluso después de ser admitidos y recibir oxígeno.
Sin embargo, muchos violan la obligación de llevar mascarilla y están siendo multados por las autoridades. La policía de tráfico también penaliza a los conductores cuyos vehículos emiten humo.
Los meteorólogos predicen lluvias ligeras en algunas zonas de Punjab, lo que puede ayudar a mejorar la calidad del aire. El gobierno también ha dicho que está estudiando métodos para inducir lluvias artificiales para combatir la contaminación en Punjab.