La primera actriz, Silvia Pinal, murió a los 94 años debido a varias complicaciones derivadas de la infección de vías urinaria que presentó recientemente.
La última diva del cine mexicano permaneció hospitalizada desde el pasado 21 de noviembre y aunque su hija Sylvia Pasquel aseguró que estaba recuperándose, lamentablemente su cuerpo no resistió.
La artista vivió sus últimos momentos rodeada de sus familiares, entre los que se encuentran Alejandra Guzmán, Sylvia Pasquel, Stephanie Salas, Luis Enrique Guzmán y Camila Valero, quienes se fueron reuniendo en el hospital. Horas antes, se informó que estaba recibiendo cuidados paliativos y se le habían dado los santos óleos.
Su amplia trayectoria será recordada por películas como Viridiana (1961) —cinta que incluso protegió con su vida— y El ángel Exterminador (1962), además del icónico programa Mujer, casos de la vida real.
Silvia Pinal era una de las últimas divas del cine mexicano de la Época de Oro, su trabajo profesional también abarcó el teatro de comedia musical e incluso fue Senadora del Congreso de la Unión. La querida actriz nació el 12 de septiembre de 1931 en Heroica Guaymas, Sonora.
La actriz trabajó de cerca con el cineasta Luis Buñuel, concretamente en las producciones El Ángel Exterminador, Viridiana y Simón del desierto, de 1964.
Este deceso conmocionó tanto a sus familiares como los admiradores de su trayectoria, quienes expresaron sus condolencias en la caja de comentarios de todas las publicaciones sobre ella, recordando con cariño a la conductora de la famosa serie unitaria, Mujer, casos de la vida real. Cabe señalar que muchos admiradores de la actriz estuvieron al pendiente de su situación de salud desde que tuvo complicaciones.
Entre los Premios Ariel que obtuvo se encuentran Coactuación femenina, en 1953, por la película Un rincón cerca del cielo; Actriz en el año 1957, por la película Locura Pasional; actriz en 1958 por La dulce enemiga y el Ariel de Oro en 2008, por su trayectoria.
Nacida en Guaymas, Sonora, en 1931, Silvia Pinal se consolidó como una institución en el mundo del espectáculo mexicano. Su relación con el actor y director Rafael Banquells le permitió un sólido aprendizaje en el teatro, lo que le otorgó popularidad en la capital mexicana. Esta experiencia fue crucial para su desarrollo profesional, llevándola a protagonizar una serie de películas que, aunque comerciales, fortalecieron su popularidad.
La carrera de Pinal no se limitó a México. Su participación en la obra maestra de Luis Buñuel, Viridiana (1961), le otorgó un importante reconocimiento en la cinematografía internacional. Cabe señalar que la actriz protegió con su vida esta cinta cuando iba a ser incendiada.
Además, su trabajo en películas españolas como Adiós, Mimí Pompón (1960) de Luis Marquina y Maribel y la extraña familia (1960) de José María Forqué, consolidó su presencia en el cine europeo.
Debido a su participación en películas y obras de teatro, Silvia Pinal fue considerada como la última Gran Diva del Cine de Oro en México, estas son algunas de las producciones en las que llegó a participar: El rey del barrio (1950), Un extraño en la escalera (1955), La Soldadera (1967), El Inocente (1956), Mi desconocida esposa (1958), Pecado mortal (1954).