Rusia y Ucrania intercambiaron hoy a 101 prisioneros de guerra de cada bando, según informaron respectivamente el Ministerio de Defensa ruso y la Oficina Presidencial ucraniana.
“Como resultado de un proceso de negociación, 101 militares rusos que corrían el peligro de morir en cautiverio fueron devueltos del territorio controlado por Kiev”, señaló el departamento castrense ruso en un comunicado.
La nota agrega que los liberados recibirán tratamiento, rehabilitación y asistencia psicológica en instituciones médicas del Ministerio de Defensa.
Por otro lado, el jefe de la Oficina Presidencial ucraniana, Andriy Yermak, señalo en su cuenta de Telegram que “hoy vuelven a casa 101 soldados y un civil”.
Yermal precisó que entre los prisioneros hay “94 defensores de Mariúpol, incluidos 63 combatientes de Azovstal” y finalmente tuvieron que rendirse en mayo de 2022.
“Sus familias les esperaban desde hace mucho tiempo”, escribió y dijo que “muchos héroes tienen lesiones de diversa gravedad”.
Yermak también aseguró que las autoridades continuarán trabajando para liberar a todos los prisioneros ucranianos.
Desde el comienzo de la invasión rusa en febrero del pasado año, han sido canjeados varios miles de prisioneros de ambos bandos.
A finales del pasado año un tribunal ucraniano condenó a cuatro prisioneros rusos a once años de prisión cada uno por crímenes de guerra.
El Kremlin niega categóricamente que sus soldados hayan cometido dichos crímenes en territorio ruso, aunque Kiev ha pedido a Occidente la creación de un tribunal internacional para juzgar dichos abusos.
La Justicia de Ucrania ha condenado ya a 25 soldados rusos por crímenes de guerra, según informaciones del Fiscal general Andriy Kostin, quien señala además que hay 92 militares imputados y diligencias abiertas contra otros 260.
“La destrucción de la población civil es una estrategia deliberada de la Federación Rusa, que incluye el asesinato, la tortura y la violencia sexual”, afirmó Kostin a través de Telegram, según reproduce el portal Ukrinform.
El Fiscal ucraniano recuerda además las discusiones abiertas entre los aliados occidentales de Ucrania para la creación de un tribunal especial para juzgar los crímenes de guerra cometidos contra su país.
Los tres ámbitos principales de las acusaciones se centrarán en la guerra de agresión rusa, como tal, el genocidio y los crímenes de guerra.
Kostin añade que tanto las acusaciones registradas desde el inicio de la invasión rusa, el 24 de febrero de 2022, como los anteriores, desde la anexión de Crimea en 2014 y en sucesivas ofensivas en el Donbás, deben servir de base para llevarlos luego al Tribunal Europeo de DDHH y la Corte Internacional de Justicia de la ONU.
Según Ukriform, en la actualidad hay unos 39 países o instituciones internacionales que están investigando sobre el terreno o en su propio territorio -principalmente, con los testimonios de refugiados acogidos desde el inicio de la invasión- los presuntos crímenes de guerra.