La crisis política que envuelve al primer ministro canadiense, Justin Trudeau, se agrava mientras un número creciente de miembros del Partido Liberal solicita su renuncia, exigiendo la oportunidad de un nuevo liderazgo antes de las elecciones de 2025.
Jenica Atwin, secretaria parlamentaria de un ministro del gabinete, declaró públicamente que Trudeau debería abandonar el cargo y advirtió que no se postulará para la reelección si él continúa. Por su parte, Chad Collins, miembro del parlamento por Ontario, afirmó que al menos 50 liberales electos —aproximadamente un tercio del contingente liberal en la Cámara de los Comunes— comparten esta postura.
La situación se volvió más crítica tras la renuncia de Chrystia Freeland, ministra de Finanzas y aliada clave de Trudeau, quien abandonó su cargo el lunes pasado. Según Collins, esta decisión ha causado un daño irreparable al primer ministro, intensificando los llamados internos para un cambio de liderazgo en el Partido Liberal.