La policía brasileña y la unidad portuguesa de Interpol desmantelaron una red criminal que operaba una empresa ficticia en Lisboa y que defraudó a miles de brasileños en un plan inspirado en la película El lobo de Wall Street.
En un comunicado, la policía brasileña dijo que un ciudadano checo establecido en Lisboa abrió un centro de llamadas y contrató a cientos de trabajadores brasileños en apuros que viven en la capital portuguesa.
El grupo tenía la tarea de llamar a personas en Brasil y convencerlas de invertir en acciones. El dinero de las víctimas terminó en las cuentas de la empresa tras decirles que se había perdido en el mercado.
“Debido a la desesperación (…) se les animó a hacer nuevas inversiones con la esperanza de revertir la pérdida”, dijo el jefe de policía Eric Sallum. “Resulta que las nuevas inversiones también generaron pérdidas, creando una bola de nieve”.
La investigación encontró que el grupo había estado operando durante al menos cuatro años y afectó a miles de personas, muchas de las cuales perdieron los ahorros de toda su vida, mientras ganaban millones en reales brasileños.
Seis líderes de la red fueron arrestados para enfrentar cargos de fraude y lavado de dinero, se congelaron cuentas bancarias y se eliminaron varios sitios web falsos.
Había una “atmósfera sociópata” en el centro de llamadas, que según la policía imitaba el éxito de taquilla de 2013 El lobo de Wall Street, basado en las memorias de Jordan Belfort, quien terminó en prisión en la década de 1990 por defraudar a los inversores por millones de dólares. Se animó a los trabajadores a ver la película y replicar el comportamiento del personaje principal interpretado por Leonardo Di Caprio.
“El lema en la empresa era: piensen en ustedes y en sus familias, olvídense de las víctimas”, indicó el jefe policial Eric Sallum.