Un barco con 47 migrantes a bordo se ha hundido y se teme que haya producido decenas de muertos, a pesar de que las autoridades italianas habían sido informadas de su localización desde la noche del sábado, aseguró hoy Alarm Phone, una red de activistas que reciben las llamadas de las barcazas que se encuentran en peligro en el Mediterráneo Central.
Posteriormente, los activistas escribieron en sus redes sociales: “Después del hundimiento con muchas muertes, tememos que los sobrevivientes, que vieron morir a sus amigos antes de ser rescatados por un barco mercante, se vean obligados a ir a Libia o Túnez, donde les esperan condiciones inhumanas”.
Mientras que por su parte, la ONG mediterránea Saving Humans criticó que “a pocos días del naufragio de Cutro, nos encontramos ante un nuevo caso dramático de no asistencia y retraso en el rescate de personas en peligro en el mar” y añadieron; “Se debe hacer todo lo posible de inmediato para recuperar a los desaparecidos y a os supervivientes”.
El barco había sido identificado frente a las costas de Libia y Alarm Phone explicó que las autoridades italianas habían dado instrucciones a los buques mercantes presentes en la zona pero que estos se limitaron a observar durante 24 horas, como se recoge en un vídeo tomado por la avioneta “Seabird2 de la ONG Sea Watch.
Sea Wach informó por su parte que el centro de coordinación de Roma se puso en comunicación con dos buques mercantes para que coordinase el rescate con la Guardia Costera de Libia, pero “ante el mal tiempo, Tripoli informó de que no podía enviar lanchas”.
El vídeo muestra el barco en grandes dificultades debido al fuerte oleaje y los barcos mercantes tratando de protegerlo de las olas pero sin poder intervenir.
La información del nuevo naufragio se produce horas después de que los cuerpos de dos adultos y de un bebe, fueran localizados en las playas de Steccato di Cutro, en la región de Calabria, sur de Italia, por lo que ascienden a 79 las víctimas del naufragio del pasado 26 de febrero de una barca de migrantes.
De los 79 muertos, 32 eran menores de edad y 23 de ellos niños de entre unos meses y 12 años, y se cree que la cifra fallecidos que procedían de Afganistán, Irán y Pakistán podrá llegar al centenar ya que los 80 supervivientes aseguraron que en la barca viajaban unas 200 personas.
En los últimos cinco días, cerca de 4.000 migrantes han llegado a las costas italianas y el ministro de Exteriores, Antonio Tajani, en una entrevista radiofónica afirmó que “la situación es preocupante, Europa debe darse cuenta”.
Según el diario milanés, 104.000 inmigrantes desembarcaron en Italia el año pasado, en parte también debido a la pandemia, pero según las previsiones de los servicios de inteligencia, el número de llegadas para 2023 será exponencialmente mayor.
Desde principios de 2023, han llegado a las costas italianas 17.592 migrantes, el triple que en el mismo período del año pasado ( 5.976 ).