El hallazgo estuvo encabezado por el equipo de investigación de la Academia Nacional de Ciencias de China (CAS) mediante la misión Chang’e 5.
La misión se llevó a cabo en 2020 y desde la Luna se enviaron muestras hacia la Tierra.
De acuerdo con la academia, derivado de la misión y recolección de muestras, se encontraron 270 mil toneladas de agua congelada en la Luna.
El agua fue recolectada en forma de “perlas de vidrio” que contienen pequeñas cantidades del líquido vital.
Los investigadores de la Academia Nacional de Ciencias de China, dirigidos por el profesor HU Sen, presentaron los resultados del estudio y hallazgo de agua en la Luna.
Aunque señalaron que la cantidad de agua en la Luna es menor que la Tierra, concluyeron que no hay duda de que en el satélite se almacena agua en sus profundidades.
Esto porque el agua detectada en la superficie del suelo Lunar muestra ciclos diurnos y pérdidas en el espacio.
Lo anterior indica que debería haber una reserva en la profundidad de los suelos lunares que sostengan la retención, liberación y reposición del agua (ciclo del agua).
Y es que estudios previos no han podido explicar cómo se lleva a cabo el ciclo del agua en la superficie de la Luna, con lo que sugieren la existencia de una reserva de agua no identificada capaz de amortiguar el proceso.
El resultado de la misión comprobó que las perlas de vidrio son la muestra de la presencia de agua en la Luna.
La investigación sugiere que la posibilidad de la formación de agua en algunos satélites como la Luna se debe a que los vientos solares actúan como amortiguadores para el ciclo de agua presente en la superficie.
“Estos hallazgos indican que los vidrios de impacto en la superficie de la luna y otros cuerpos sin aire en el sistema solar son capaces de almacenar agua derivada del viento solar y liberarla al espacio”.
Asimismo señalaron que la cantidad de agua aportada varía de 3,0 × 100 mil millones de kg a 2,7 × 100 billones de kg.
Tras dos años de investigación, los resultados sobre la reserva de agua encontrada en la Luna, que asciende a las 270 mil toneladas, se publicaron este 27 de marzo en la revista Nature Geoscience.
Para este estudio también se contó con la colaboración de la Universidad de Nanjing, la Universidad Abierta, el Museo de Historia Natural, la Universidad de Manchester y la Universidad de Ciencia y Tecnología de China.