Varios países de Asia sufren una asfixiante ola de calor con temperaturas récord en Tailandia, Bangladesh, Myanmar, Laos y Vietnam. También China y el sur del continente asiático se ha visto afectado. La región afronta unos meses duros debido al impacto de las altas temperaturas y al fenómeno de El Niño, que afectará la agricultura.
A comienzos de abril, Bangladesh registró su temperatura más alta en casi 60 años. En otros países del continente como India y Tailandia se registraron casos de personas que murieron como consecuencia del sofocante calor.
En un reciente informe, el Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático de la ONU adviertió que “cada incremento del calentamiento global intensificará peligros múltiples y concurrentes”.
El pasado 15 de abril, las autoridades meteorológicas de Tailandia registraron, en la provincia occidental de Tak, una temperatura de 44,6 grados Celsius.
Durante esta época, en Tailandia el clima es más cálido. No obstante, los habitantes del país asiático aseguran que el calor que se está experimentando es totalmente inusual.
Las autoridades meteorológicas alertan que Asia está sufriendo la peor ola de calor de abril en su historia: Pakistán ha registrado temperaturas que se elevan a 44 grados centígrados; India, 43,5 grados centígrados; Myanmar, 43,3 grados centígrados; y Bangladesh, 41,7 grados centígrados.
Expertos advierten que las poblaciones más pobres son las vulnerables a las olas de calor.
Sumado a la crisis climática, el fenómeno de El Niño traerá sequías en gran parte de Asia durante la época del monzón, lo que provocará pérdidas graves en la agricultura.
Mientras tanto, en Dhaka, capital de Bangladesh, cientos de personas se congregaron la semana pasada para orar por la lluvia.
El Centro Internacional para el Desarrollo Integrado de las Montañas (Icimod, por sus siglas en inglés) mostró su preocupación por el impacto que el constante incremento de las temperaturas pueda tener en la región del Hindu Kush en el Himalaya, el macizo montañoso situado entre Afganistán y el noroeste de Pakistán, tiene el tercer cuerpo de agua congelada más grande del planeta. Los científicos advierten que esa región se está calentando al doble del promedio mundial.
El pasado octubre, la ONU y la Cruz Roja indicaron en un informe conjunto que olas de calor serán más frecuentes, intensas y mortales en el futuro debido al cambio climático, e incluso podrían “exceder los límites humanos, psicológicos y sociales” en regiones como el Sahel, el Cuerno de África o el sur de Asia.