El Ministerio de Asuntos Exteriores de Corea del Norte ha acusado, a Seúl y a Washington de llevar las tensiones “al borde de una guerra nuclear”, similar a la Guerra de Corea de 1950-53, diciendo que continuará reforzando sus capacidades de autodefensa.
En un informe de investigación, publicado por el Instituto para Estudios Estadounidenses de la Cancillería, Corea del Norte comparó las tensiones militares actuales en la región con la noche anterior al estallido de la Guerra de Corea, mientras criticó a Corea del Sur y EE. UU. por su “delirante confrontación militar anticomunista” y “amenazas retóricas”.
“Tales medidas belicosas de EE. UU. han llevado las tensiones militares en la península coreana y en el Nordeste Asiático, que ya se encontraban sumidas en una situación extremadamente inestable, más cerca del borde de una guerra nuclear”, dijo el ministerio, en un informe en inglés publicado por la Agencia Central de Noticias de Corea del Norte (KCNA, por sus siglas en inglés).
Pyongyang afirmó que Washington está recurriendo a preocupantes actos hostiles “invadiendo descaradamente” la soberanía y la seguridad del Norte de manera más persistente que nunca, este año, y ha alcanzado un umbral que ya no se puede tolerar.
Luego advirtió que una guerra en la península se expandiría rápidamente a “una guerra mundial y una guerra termonuclear” sin precedentes a nivel global, causando las consecuencias más “catastróficas e irreversibles” para la paz y la seguridad en la región y el resto del mundo.
Agregó que Pyongyang continuará acelerando aún más sus esfuerzos para reforzar sus capacidades de autodefensa para salvaguardar su soberanía, a menos que Estados Unidos retire su “política hostil anacrónica” y su persistente amenaza militar contra el Norte.