El presidente de Sierra Leona declaró toque de queda en todo el país después de que hombres armados atacaran el cuartel principal y más grande del ejército en la capital de la nación de África occidental y luego invadieran los centros de detención, incluida una prisión importante.
El ataque generó temores de una ruptura del orden en medio de una oleada de golpes de estado en la región. En los últimos años, una serie de países de África occidental y central han experimentado golpes militares. Sólo este año, los gobiernos de Níger y Gabón fueron derrocados por facciones militares, y hubo intentos en Burkina Faso y Sudán, el último de los cuales ha desembocado en una guerra civil.
Los centros de detención, incluidas las prisiones de Pademba Road, que albergan a más de 2.000 reclusos, fueron atacados justo cuando las fuerzas de seguridad luchaban por restablecer la calma durante los tiroteos sostenidos en el cuartel militar de Wilberforce, según el ministro de Información, Chernor Bah.
Bah informó que las cárceles fueron invadidas, algunos prisioneros fueron secuestrados por los agresores, mientras que muchos otros fueron liberados, a pesar del ataque las fuerzas de seguridad lograron hacer retroceder a los agresores a las afueras de la ciudad, donde continúan los combates.
El presidente de Sierra Leona, Julius Maada Bio, declaró anteriormente un toque de queda en todo el país en respuesta a los ataques.
El presidente y el Ministerio de Información y Educación del país también dijeron que el gobierno y las fuerzas de seguridad tienen el control de la situación, tratando de disipar los temores de una posible escalada de violencia en el país cuya población de 8 millones de personas se encuentra entre las más pobres del mundo del mundo y tiene algunos de los puntajes más bajos en el Índice de Desarrollo Humano de las Naciones Unidas.
No se dieron detalles de inmediato sobre los hombres armados ni el motivo del ataque, que se produce meses después de que Bio fuera reelegido para un segundo mandato en una votación disputada en la que el principal partido de la oposición acusó a la comisión electoral de manipular los resultados.
Videos publicados en línea mostraban a soldados patrullando las calles vacías de Freetown y capturaron los fuertes disparos al amanecer.
El bloque económico regional de África occidental, CEDEAO, del que Sierra Leona es miembro, describió el incidente como un complot “para adquirir armas y perturbar la paz y el orden constitucional” en el país.
En los últimos meses, el bloque ha intentado revertir el aumento de golpes de Estado en África Occidental y Central, que ha registrado ocho tomas de poder militares desde 2020, la última en Níger y Gabón este año.