Casi 1,9 millones de palestinos, más del 80 % de la población total de la Franja de Gaza, se han visto obligados a abandonar sus hogares desde el inicio de la guerra entre Israel y el grupo islamista Hamás, dijo este lunes la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA).
En su último informe, que recaba datos hasta el 2 de diciembre, la UNRWA indicó que casi un millón de estos desplazados internos se están refugiando en 99 instalaciones de la ONU en el centro de la Franja y en las localidades sureñas de Jan Yunis y Rafah, en la frontera con Egipto.
En total, 1,2 millones de personas se están refugiando de los bombardeos y de las operaciones terrestres israelíes en 156 instalaciones de la UNRWA repartidas en todo el enclave palestino, incluidas las zonas del norte.
Por su parte, el director de la UNRWA para asuntos en Gaza, Thomas White, dijo en X (antes Twitter), que “se está produciendo otra ola de desplazamientos” hacia el sur, donde las carreteras que conducen a Rafah “están atascadas de coches y carros tirados por burros llenos de gente y sus escasas posesiones”.
Los bombardeos y las nuevas órdenes de evacuación por parte de Israel están empujando a los palestinos a concentrarse en menos de un tercio de la Franja de Gaza, dijo hoy la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA).
“La orden de evacuación empuja a la gente a concentrarse en lo que es menos de un tercio de la Franja de Gaza. Necesitan de todo: comida, agua, refugio y, sobre todo, seguridad. Las carreteras hacia el sur están congestionadas”, dijo en un comunicado el jefe de la UNRWA, Philippe Lazzarini.
El responsable de la ONU indicó que los bombardeos israelíes continúan tras las órdenes de desplazamiento desde la localidad de Jan Yunis hacia Rafah, en la frontera con Egipto, lo que ha obligado a más de 60.000 personas a refugiarse en instalaciones de la UNRWA que ya estaban superpobladas.
Asimismo, desmintió los rumores sobre supuestos planes de la ONU para establecer campamentos de refugiados en Rafah y recordó que ningún lugar de Gaza es seguro, ni en el sur ni en el suroeste, ni en Rafah ni en ninguna de las llamadas zonas seguras por parte de Israel.
“Los últimos acontecimientos están estrangulando aún más la operación humanitaria, con suministros limitados y complejos acuerdos logísticos y de coordinación que ralentizan y en ocasiones obstruyen el flujo”, denunció Lazzarini.
El Ejército israelí continúa su intensa ofensiva en la Franja de Gaza este lunes, fortaleciendo a sus tropas terrestres ante una inminente incursión en el sur del enclave palestino, donde realiza fuertes bombardeos a pesar de que cientos de miles de civiles se refugian ahí de los combates y la destrucción en el norte.