El ministro de Agricultura, Cem Özdemir también se unió a la protesta afirmando que los agricultores “no tienen alternativa” al diésel.
Los agricultores alemanes se reunieron en Berlín el lunes para protestar contra los recortes previstos a las exenciones fiscales para el diésel utilizado en la agricultura, parte de un acuerdo alcanzado por el gobierno para tapar un agujero en el presupuesto del país.
Los líderes de la coalición tripartita del canciller Olaf Scholz acordaron la semana pasada medidas para llenar un agujero de 17.000 millones de euros (18.500 millones de dólares) en el presupuesto del próximo año, diciendo que lo lograrían reduciendo los subsidios que dañan el clima y reduciendo ligeramente el gasto de algunos ministerios entre otras medidas.
Esto fue necesario después de que el tribunal más alto de Alemania anulara una decisión anterior de reutilizar 60 mil millones de euros originalmente destinados a amortiguar las consecuencias de la pandemia de COVID-19 para medidas que ayuden a combatir el cambio climático y modernizar el país. La maniobra violó los estrictos límites autoimpuestos por Alemania en materia de acumulación de deuda.
A medida que han surgido más detalles del acuerdo, también ha surgido el descontento, en particular por un plan para recortar las exenciones fiscales para el diésel agrícola y eliminar una exención del impuesto sobre automóviles para vehículos agrícolas.
Incluso el ministro de Agricultura, Cem Özdemir, ha protestado. Dijo a la televisión ARD que los agricultores “no tienen alternativa” al diésel.
Agricultores en tractores llegaron a la capital el lunes para protestar en la Puerta de Brandenburgo.
El vicecanciller Robert Habeck, miembro del Partido Verde de Özdemir, advirtió contra el riesgo de desmantelar el acuerdo presupuestario de la semana pasada y dijo que cualquiera que quiera revertir los recortes planeados debe encontrar una forma de financiarlo que sea aceptable para todos.
El Ministerio de Economía de Habeck enfrenta críticas dentro de la coalición gobernante por otro aspecto del acuerdo presupuestario: un fin abrupto a los subsidios para la compra de autos eléctricos nuevos, que originalmente debían permanecer vigentes hasta finales del próximo año.
El ministerio anunció el sábado que no se aceptarían nuevas solicitudes después del domingo por la noche.
