La esposa del príncipe William pudo regresar al palacio tras dos semanas de encontrarse internada en el hospital.
Kate, la Princesa de Gales, regresó a casa desde el hospital después de una estancia de dos semanas tras una cirugía abdominal, dijo el lunes el Palacio de Kensington. Kate, de 42 años, esposa del heredero al trono británico, el príncipe William, estaba haciendo buenos progresos, según el comunicado del Palacio de Kensington, después de una cirugía para una enfermedad no especificada, pero no cancerosa, en la Clínica de Londres.
Su suegro, el rey Charles, también recibió tratamiento en el mismo hospital, donde pasó tres noches tras el tratamiento previsto el viernes para tratar un agrandamiento de la próstata, con visitas regulares de su esposa, la reina Camilla.
El Palacio de Kensington dijo que Kate ya estaba de regreso en su casa en la finca de Windsor, al oeste de Londres.
“Ella está haciendo buenos progresos”, dijo su oficina. “El príncipe y la princesa desean agradecer enormemente a todo el equipo de la Clínica de Londres, especialmente al dedicado personal de enfermería, por la atención brindada”.
Kate no regresará a sus deberes públicos hasta después de Pascua. Su esposo, el príncipe William, heredero al trono, pospuso sus compromisos para cuidar de sus tres hijos, el príncipe George, de 10 años, la princesa Charlotte, de 8, y el príncipe Louis, de 5.
Se han dado pocos detalles sobre su enfermedad o cirugía, ya que la realeza británica suele considerar todos los asuntos médicos como un asunto privado.
Charles, sin embargo, optó por hacer pública su condición para animar a otros hombres a hacerse controles médicos.
Visitó a Kate en el hospital antes de someterse a un procedimiento correctivo para tratar un agrandamiento benigno de la próstata, una afección común entre los hombres mayores de 50 años.
Los compromisos públicos de Charles también se han pospuesto para permitir un breve período de recuperación.
