Las mujeres afganas se sienten asustadas o inseguras al dejar solas sus hogares debido a los decretos de los talibanes y las campañas de aplicación de la ley sobre la ropa y los tutores masculinos, según un informe de la misión de la ONU en Afganistán.
El informe llega días antes de que comience una reunión convocada por la ONU en la capital de Qatar, en la que los estados miembros y enviados especiales a Afganistán discutirán el compromiso con los talibanes y las crisis del país, incluida la situación de los derechos humanos.
Los talibanes, que se apoderaron de Afganistán en 2021 han excluido a las mujeres de la mayoría de las áreas de la vida pública y han impedido que las niñas vayan a la escuela más allá del sexto grado como parte de las duras medidas que impusieron a pesar de promesas iniciales de un gobierno más moderado.
También están restringiendo el acceso de las mujeres al trabajo, los viajes y la atención médica si no están casadas o no tienen un tutor masculino, y arrestan a quienes no cumplen con la interpretación talibán del hijab o velo islámico.
El informe de la misión de la ONU dice que los decretos se están aplicando mediante arrestos, acoso e intimidación. Las mujeres dijeron que temen cada vez más ir a espacios públicos debido a la amenaza de arresto y al estigma y vergüenza duraderos asociados con el hecho de estar bajo custodia policial.
Más de la mitad de las mujeres entrevistadas para el informe se sentían inseguras al salir de casa sin un tutor masculino, o mahram. Los riesgos para su seguridad y sus niveles de ansiedad empeoraban cada vez que se anunciaba un nuevo decreto dirigido específicamente a ellos, según el informe.
Las mujeres que salían con un mahram se sentían más seguras, pero notaban el estrés de depender de otra persona para que las acompañara. Algunas dijeron que sus tutores varones las reprendían por perder el tiempo si querían visitar ciertas tiendas o desviarse de una ruta limitada a realizar tareas básicas necesarias.
Algunas mujeres dijeron que los parientes varones también tenían miedo y eran reacios a abandonar el hogar con parientes mujeres, ya que esto los expondría al acoso de los talibanes.
Un portavoz del Ministerio del Vicio y la Virtud, la policía moral de los talibanes que hace cumplir esos decretos, dijo que era una tontería y una mentira que las mujeres tuvieran miedo de ir a las tiendas. Dijo que acosar a las mujeres era ilegal.
Heather Barr, de Human Rights Watch, dijo que el miedo de las mujeres afganas a salir de casa sin compañía era condenatorio y devastador, pero no sorprendente. Parecía ser un objetivo específico de los talibanes asustar a las mujeres y niñas para que no abandonaran sus hogares, dijo Barr.