Tras el colapso de la presa, los niveles de agua aumentaron y provocaron que las casas cerca de la frontera con Kazajstán se inundaran.
Las autoridades rusas se apresuraron a ayudar a los propietarios de viviendas desplazados por las inundaciones a medida que aumentaban los niveles del agua en el río Ural, dijeron las autoridades.
Las inundaciones en la región de Orenburg, cerca de la frontera de Rusia con Kazajstán, provocaron la evacuación de miles de personas tras el colapso de una presa el sábado. El gobierno de Rusia ha declarado la situación una emergencia federal. Aunque el presidente Vladimir Putin aparece con frecuencia en la televisión estatal rusa reuniéndose con funcionarios y viajando por todo el país, el Kremlin dijo que aún no planea visitar la región afectada por las inundaciones.
El nivel del agua del río en la ciudad de Orenburg superó los 10 metros, informó la agencia estatal de noticias Ria Novosti, citando al gobernador regional. Las fotos compartidas por los medios de comunicación rusos mostraban carreteras cubiertas de agua, campos sumergidos y casas parcialmente sumergidas.
El agua se acercaba a los rascacielos, y más de 300 viviendas quedaron inundadas durante la noche, según la agencia estatal de noticias Tass.
La gente de la ciudad de Orsk se reunió en una inusual protesta, pidiendo compensación después de que sus casas sufrieran daños. Las protestas son inusuales en Rusia, donde las autoridades han reprimido sistemáticamente cualquier forma de disidencia tras la invasión de Ucrania por parte de Putin. Cientos de personas se reunieron frente al edificio administrativo en Orsk el lunes, y videos publicados en las redes sociales rusas mostraban a personas gritando “¡Putin, ayúdanos!” y “¡Vergüenza!”
Otros videos en las redes sociales mostraban a rusos enojados que se negaban a abandonar las áreas cercanas a sus hogares porque decían que los ladrones estaban saqueando casas abandonadas con botes.
Las inundaciones llevaron a la refinería de petróleo de Orsk a suspender sus operaciones.
Las inundaciones obligaron a evacuar a más de 4.000 personas, entre ellas 885 niños, en la región de Orenburg, según informó el domingo el gobierno regional. Tass dijo el lunes que alrededor de 10.000 viviendas, incluidas unas 7.000 en Orsk, quedaron inundadas.
Tras la protesta, Tass informó que el gobernador de la región de Orenburg, Denis Pasler, prometió pagos de compensación a los afectados, incluidos 10.000 rublos (108 dólares) al mes durante seis meses a las personas obligadas a abandonar sus hogares por las inundaciones.
Los daños totales causados por las inundaciones en la región se estiman en unos 21 mil millones de rublos (227 millones de dólares), dijo el domingo el gobierno regional.
Se ha iniciado una investigación penal para investigar presuntas violaciones de construcción que pueden haber causado la rotura de la presa. Las autoridades locales dijeron que la presa podría soportar niveles de agua de hasta 5,5 metros (casi 18 pies). El domingo, el nivel en Orsk alcanzó los 9,7 metros (31,82 pies), según el sitio ruso de información sobre el nivel del agua AllRivers.
