El gobierno de Francia presentó un proyecto de ley para permitir que los adultos con cáncer terminal u otras enfermedades incurables tomen medicamentos letales, mientras crecen las demandas públicas de opciones legales para ayudar a morir. Muchos franceses han viajado a países vecinos donde el suicidio con asistencia médica o la eutanasia son legales. El presidente francés, Emmanuel Macron, ha prometido durante mucho tiempo un proyecto de ley de este tipo.
Catherine Vautrin, la ministra de Salud, dijo que esta nueva medida propuesta solo será benéfica para mayores de 18 años y ser ciudadanos franceses o vivir en Francia.
Un equipo de profesionales médicos necesitaría confirmar que el paciente tiene una enfermedad grave e incurable, sufre un dolor intolerable e intratable y está buscando medicación letal por su propia voluntad. Aquellos con afecciones psiquiátricas graves y trastornos neurodegenerativos como la enfermedad de Alzheimer no serán elegibles.
El paciente iniciaría la solicitud de medicación letal y confirmaría la solicitud después de un período de reflexión, dijo Vautrin, de aprobarse, el médico entregaría una receta, válida por tres meses, para el medicamento letal.
El paciente podría tomarlo en casa, en un asilo de ancianos o en un centro de atención médica, dijo Macron. Si su condición física no les permite hacerlo solos, podrán recibir ayuda de alguien de su elección o de un médico o una enfermera.
El proyecto de ley pasa ahora al parlamento para su debate. Vautrin instó a una enorme cantidad de escucha, una enorme cantidad de humildad, cuando tocamos temas de vida y muerte, y un enorme respeto por la libertad de conciencia de cada uno de nosotros.
También anunció 1.100 millones de euros en nuevos gastos en cuidados paliativos y otros cuidados al final de la vida.
El suicidio médicamente asistido implica que los pacientes tomen, por su propia voluntad, una bebida letal o un medicamento recetado por un médico a quienes cumplen ciertos criterios. La eutanasia implica que los médicos u otros profesionales de la salud administren una inyección letal a los pacientes que cumplen ciertos criterios a petición propia.
El suicidio asistido está permitido en Suiza, Portugal y varios estados de Estados Unidos. Actualmente, la eutanasia es legal en los Países Bajos, España, Canadá, Australia, Colombia, Bélgica y Luxemburgo bajo determinadas condiciones.