Trudeau dijo que Canadá también impondrá un arancel del 25% al acero y aluminio chinos.
Canadá anunció que está lanzando un arancel del 100% a las importaciones de vehículos eléctricos fabricados en China, igualando los aranceles estadounidenses impuestos sobre lo que los gobiernos occidentales dicen que son subsidios de China que le dan a su industria una ventaja injusta.
El anuncio se produjo después del estímulo del asesor de seguridad nacional de Estados Unidos Jake Sullivan durante una reunión con el primer ministro canadiense Justin Trudeau y los ministros del gabinete el domingo. Sullivan está haciendo su primera visita a Beijing el martes.
Trudeau dijo que Canadá también impondrá un arancel del 25% al acero y aluminio chinos. “Actores como China han elegido darse una ventaja injusta en el mercado global”, dijo.
Uno de los vehículos eléctricos fabricados en China que se importan a Canadá es de Tesla, fabricado en la fábrica de la compañía en Shanghái, aunque la compañía estadounidense podría evitar el arancel cambiando a abastecer a Canadá desde fábricas en Estados Unidos o Alemania.
Las marcas chinas aún no son un jugador en Canadá. Sin embargo, el gigante chino de vehículos eléctricos BYD estableció una entidad corporativa canadiense la primavera pasada y ha indicado que tiene la intención de intentar entrar en el mercado canadiense a principios del próximo año.
Las empresas chinas pueden vender vehículos eléctricos por tan solo 12.000 dólares. Las plantas de células solares y las fábricas de acero y aluminio de China tienen capacidad suficiente para satisfacer gran parte de la demanda mundial. Los funcionarios chinos argumentan que su producción mantiene bajos los precios y ayudaría a una transición hacia la economía verde.
La viceprimera ministra Chrystia Freeland dijo que Canadá también lanzará una consulta de 30 días sobre posibles aranceles a las baterías, piezas de baterías, semiconductores, minerales críticos, metales y paneles solares chinos.
La embajada china dijo que Ottawa ignoró las reiteradas objeciones de Beijing y dijo que la medida dañará el comercio y la cooperación económica.
