La manifestación en defensa del Instituto Nacional Electoral (INE) que se realizó la mañana de este domingo congregó a unas 90 mil personas en la plancha del Zócalo capitalino, según confirmó el Centro de Orientación Vial de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México (Ovial-SSC).
Por medio de su cuenta de Twitter, el Centro señaló que personal de la Secretaría de Seguridad Ciudadana mantuvo un despliegue operativo de vialidad en la zona para garantizar la movilidad de la ciudadanía.
“El día de hoy, en el #Zócalo de la Ciudad de México, 90 mil personas realizaron una manifestación pacífica, personal de @SSC_CDMX mantuvo un despliegue operativo de vialidad en la zona para garantizar la movilidad de la ciudadanía”, se lee en un tuit.
Asimismo, personal de la Subsecretaría de Control de Tránsito realizó cortes viales en calles aledañas a la Plaza de la Constitución durante la concentración. Sin embargo no se dio a conocer el número de elementos que participaron en el operativo.
Este domingo decenas de miles de personas llenaron la principal plaza de la Ciudad de México este domingo para protestar contra unas reformas electorales que, consideran, amenazan la democracia. El Zócalo de la capital mexicana tiene una capacidad de aproximadamente 100 mil personas, pero muchos manifestantes no cabían.
La mayoría de los manifestantes vestían prendas blancas y rosas, los colores del Instituto Nacional Electoral, gritaban consignas como: “¡Mi voto no se toca!”.
Las reformas electorales propuestas por el Presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador fueron aprobadas la semana pasada. Reducirían los sueldos, el financiamiento para las oficinas electorales locales y la capacitación de ciudadanos que operan y supervisan esos centros de votación. También disminuiría las sanciones para candidatos que no reporten sus gastos de campaña.
Bajo la consigna “El INE No se toca” y “Yo Defiendo al INE” las y los asistentes llamaron a los ministros a no aceptar la propuesta de reforma.
“Él quiere regresar al pasado… cuando la votación era controlada por el Gobierno”, comentó el manifestante Enrique Bastien, veterinario de 64 años de edad, que recordó las décadas de 1970 y de 1980 cuando el Partido Revolucionario Industrial (PRI), gobernó México con fraude y dádivas. “Era una vida dependiente”, añadió.
Muchos otros manifestantes simplemente desconfiaban del tipo de recuento erróneo de votos, gastos excesivos de campaña y tácticas de presión electoral que eran habituales en México antes de que se creara el organismo electoral independiente en la década de 1990.
López Obrador ha señalado que las críticas son elitistas, y señaló que el INE gasta demasiado dinero, fondos que deberían ser destinarse en los más pobres.
El mandatario mexicano dijo el jueves que promulgará la reforma, aunque espera impugnaciones judiciales. Muchos de los asistentes a la protesta del domingo expresaron su esperanza de que la Suprema Corte de Justicia de México anule partes de la reforma, como han hecho los tribunales con otras iniciativas presidenciales.