Son muchas las razones que ocasionan la gentrificación. Algunas universidades señalan al turismo como uno de los factores iniciales, ya que la llegada masiva de visitantes con dinero a zonas ‘olvidadas’ visibiliza y revalora dichos sectores urbanos.
¿Cada día que pasa las rentas, los chilaquiles, el café y el panecito de tu colonia son más y más caros? Estos podrían ser síntomas de gentrificación y podría ocasionar que tú y tus vecinos se vean obligados a abandonar sus ‘barrios’.
La gentrificación se define como rehabilitación urbanística y social de una zona deprimida o deteriorada, que provoca la migración de los vecinos empobrecidos del barrio por otros de un nivel social y económico más alto.
Una de las ciudades que más ha padecido este ‘problema’ es la Ciudad de México, que desde hace algunos años ha visto como miles y miles de extranjeros invaden sus colonias más emblemáticas, encareciendo el costo de vida y desplazando a personas del lugar que han habitado durante varios años, incluso generaciones.
El habitante local siente valorado su patrimonio, aumenta sus ingresos y comienza una modificación del ambiente urbano.
De acuerdo a la Universidad Intercontinental, los “problemas” comienzan cuando la población local ve esta nueva fuente de ingresos más lucrativa que sus antiguas ocupaciones.
“Abandonan sus antiguos quehaceres para centrarse en las demandas de los visitantes. De este modo, muchas de las actividades que hicieron único ese lugar terminan desapareciendo para siempre”, señalan.
Los turistas necesitan un lugar para dormir y están dispuestos a pagar un poco más por un lugar bien ubicado. De inmediato, los propietarios de viviendas en estos lugares intentarán rentar sus casas a turistas, para multiplicar sus ganancias. Para ello, es necesario deshacerse de los antiguos arrendatarios; una forma de lograrlo es, por ejemplo, aumentar las rentas.
Algunas de las consecuencias de la gentrificación son:
- Desplazamiento de la población humilde original por otra de mayor poder adquisitivo. La subida del nivel de vida y el nivel de los alquileres ‘expulsa’ a los antiguos habitantes.
- Los pobladores empobrecidos enfrentan a un complejo problema de movilidad, pues tienen que invertir hasta dos horas de camino para llegar a sus trabajos, escuelas y gastar bastante en desplazarse.
- Los costos de los bienes y servicios aumentan, adaptándose al nivel adquisitivo de los nuevos inquilinos, lo que podría originar un proceso inflacionario.
- Las viviendas permanentes son sustituidas por casas y habitaciones en renta, para satisfacer las necesidades de habitantes temporales.