El canciller, Marcelo Ebrard, dijo que se fijó como un objetivo primordial en reuniones en Washington con funcionarios de Estados Unidos reducir drásticamente el flujo de precursores químicos a ambos países, en momentos en que luchan por reducir el consumo de fentanilo.
En semanas recientes, autoridades de ambos países han pedido a China apoyo para frenar el envío de precursores químicos desde esa nación, con el objetivo de parar la producción de la droga sintética que causa miles de muertes en Estados Unidos.
“Es la meta que tenemos”, dijo Ebrard en un video divulgado por su oficina, sin mencionar los posibles orígenes de las sustancias químicas”.
El canciller mexicano informó también que México pidió a autoridades de Estados Unidos crear un grupo especial que supervise “semana con semana” que el flujo de armas desde ese país a territorio mexicano se reduzca “sustancialmente”.
México ha planteado que los cárteles de la droga usan armas que entran ilegalmente al país cruzando la frontera con Estados Unidos y ha dicho que el combate a ese tráfico es una responsabilidad compartida con su socio comercial.
Durante las últimas semanas, varias voces de la Administración de Joe Biden han opinado que México debería hacer más en el combate contra el fentanilo y el crimen organizado, mientras la oposición republicana ha ido más allá y desea que se autorice al Ejército a intervenir contra las organizaciones responsables “estén donde estén”.
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha respondido que la crisis de sobredosis de opiáceos es un tema de salud pública que Estados Unidos debe resolver e incluso ha negado que en su país se fabrique fentanilo, argumentando que esta sustancia llega a Norteamérica desde Asia.