En el Estado de México se ha presentado un compendio de encuestas, de casas serias, que colocan a la aliancista Alejandra del Moral Vela a siete puntos de la candidata de Morena, Delfina Gómez Álvarez.
Habrá quien diga que se trata de encuestas manoseadas o cuchareadas, pero el mismo argumento se puede esgrimir en el caso de Morena.
Lo que no admite dudas, es que la maquinaria del priismo añejo, al que de a poco se van sumando los panistas y lo que queda del PRD, comienza a carburar.
Quizá un poco tarde, dado que la campaña es de apenas dos meses, pero camina bajo la presión de mantener su sobrevivencia, pues los tricolores saben que una derrota los borraría del mapa político definitivamente.
No solo el PRI requiere ganar la gubernatura del Estado de México; la oposición en general tiene sus esperanzas en esa elección.
Derrotar a Morena daría a la oposición el impulso necesario para enfrentar la elección presidencial en 2024; un premio a la autoestima tan a la baja en los últimos años.
De ahí que la guerra se haya trasladado a los números de las encuestas, las serias y las que no lo son.
El jueves pasado, el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) falló en contra de que Morena exhiba encuestas “gansito’’, esto es, las que hacen sus seguidores, bots, y empresas religiosas (esas que solo sabe Dios si existen), con las que pretende soportar su tesis de que Delfina va 20 puntos arriba de Del Moral.
Como se sabe, todas las casas encuestadoras que participan en un proceso electoral deben estar acreditadas ante el Instituto Electoral local y cumplir con cierta metodología.
La mayoría de las encuestas exhibidas por Morena carecen de esa metodología y, de acuerdo con el fallo del Tribunal, no deberían ser publicadas pues en su entender son instrumentos para coaccionar el voto.
Sea como sea, en el último corte de las encuestas de seguimiento (29 de abril pasado), el promedio de las casas serias colocaba a Del Moral con 37% de intención del voto contra 44% de la morenista Gómez.
El porcentaje de indecisos se ubicaba entre 18 y 20%, porcentaje que previsiblemente se reducirá si acaso se efectúa el segundo debate programado para el 18 de mayo.