La valla de alambre de púas para evitar la inmigración ilegal que militares británicos ayudaron construir en la frontera este de Polonia ha dejado ya decenas de personas heridas al intentar cruzar desde Bielorrusia hacia la Unión Europea.
La organización Médicos Sin Fronteras (MSF) asegura que, hasta el 24 de abril, 16 migrantes ilegales resultaron gravemente heridos en solo un mes mientras trataban de cruzar la peligrosa valla de 5,5 metros de alto, reporta The Guardian. Algunas personas, principalmente, de Siria, el Kurdistán iraquí y Afganistán, requirieron hospitalización debido a contusiones, esguinces, cortes y presuntas fracturas.
Anteriormente, el Ministerio de Defensa del Reino Unido confirmó que envió ingenieros militares a Varsovia entre diciembre de 2021 y agosto de 2022 para brindar “apoyo a la infraestructura fronteriza” en respuesta a las “presiones de la migración irregular”. Desde el lado polaco, también admitieron la participación de soldados británicos en la instalación de la valla, terminada a mediados del año pasado.
Ante los peligros de la barrera, la asesora de la ONG Sophie McCann considera “profundamente alarmante que el Gobierno del Reino Unido esté apoyando activa y directamente estas inhumanas medidas contra la inmigración”.
“Los equipos médicos de MSF han visto las lesiones y el sufrimiento causados por el trato abusivo en las fronteras de Europa a refugiados, personas que buscan asilo y otros inmigrantes”, resaltó la activista.
Un comisionado del Gobierno polaco, Stanislaw Zaryn, tuiteó el 25 de mayo que ya se habían registrado más de 10.000 intentos de entrada ilegal a Polonia desde Bielorrusia en lo que va del año, asegurando que en los últimos días la cantidad de estos intentos se había incrementado.
En particular, 151 extranjeros intentaron ingresar ilegalmente a Polonia el miércoles pasado y 60 de ellas “regresaron al ver a las patrullas fronterizas polacas”, informó la Guardia Fronteriza del país.