El gobierno de Finlandia reabrirá dos de los ocho puntos fronterizos con Rusia a finales de esta semana, dijeron funcionarios el martes, luego de una repentina afluencia de inmigrantes en noviembre.
El gabinete del primer ministro Petteri Orpo cerró temporalmente toda la frontera de 1.340 kilómetros hace dos semanas por temor a que Moscú estuviera utilizando inmigrantes para desestabilizar a Finlandia en un presunto acto de “guerra híbrida”.
El Kremlin ha negado que Rusia esté animando a los inmigrantes a entrar en Finlandia y ha dicho que lamenta el cierre de las fronteras finlandesas.
Finlandia se convirtió en el miembro número 31 de la OTAN en abril, y muchos ciudadanos del país interpretan las acciones de Moscú como una venganza por la decisión de Helsinki de unirse a la alianza militar transatlántica después de décadas de alineamiento no militar y vínculos pragmáticos y amistosos con Rusia.
Orpo y la ministra del Interior, Mari Rantanen, dijeron en una conferencia de prensa que dos puntos de cruce del sureste, Imatra y Niirala, reabrirían desde el jueves hasta al menos el 14 de enero. En total, hay ocho puntos de cruce para el tráfico de pasajeros en el territorio entre Finlandia y Rusia y un puesto de control ferroviario para trenes de carga.
Orpo destacó que la decisión del gobierno de mantener cerrados por ahora los seis puntos fronterizos restantes fue unánime.
Dijo que el cierre total de la frontera durante dos semanas logró detener la afluencia de inmigrantes y que su gabinete informó decisivamente a Moscú que Helsinki no acepta las supuestas acciones de Rusia.
Las autoridades finlandesas dicen que cerca de 1.000 inmigrantes sin visas adecuadas o documentación válida habían llegado a la frontera desde agosto hasta finales de noviembre, y más de 900 de ellos solamente en noviembre. Las cifras son notablemente más altas de lo habitual.
A principios de diciembre, las autoridades finlandesas dijeron que la gran mayoría de los inmigrantes –casi todos los cuales buscan asilo en Finlandia– procedían de tres países: Siria, Somalia y Yemen.
Se informó que grupos más pequeños incluían ciudadanos de Afganistán, Eritrea, Etiopía, Irak, Kenia y Pakistán, entre otras naciones.
Si bien los funcionarios fronterizos finlandeses inicialmente dijeron que los inmigrantes utilizaban Rusia simplemente como país de tránsito en el camino desde sus países de origen a la UE, las autoridades dijeron más tarde que una clara mayoría de ellos vivían (trabajaban o estudiaban) en Rusia con visas legales.