Cientos de vuelos fueron cancelados y decenas de otros reprogramados en Argentina el miércoles cuando los trabajadores sindicalizados del transporte aéreo iniciaron una huelga de 24 horas en todo el país para exigir mejores salarios, en la última señal de malestar social en el país sudamericano. La mayoría de los más de 50 aeropuertos del país permanecían abiertos, pero las aerolíneas habían cancelado cientos de vuelos. En el aeropuerto más grande del país en las afueras de Buenos Aires, el aeropuerto internacional de Ezeiza, solo operaban el miércoles la compañía de bajo costo Flybondi y American Airlines.
La estatal Aerolíneas Argentinas dijo en un comunicado que 331 vuelos se vieron afectados por el paro convocado por la Asociación de Personal Aeronáutico, la Asociación Argentina de Pilotos de Líneas Aéreas y el Sindicato de Altos y Profesionales de Empresas Aerocomerciales.
Se espera que la huelga afecte a cerca de 24.000 pasajeros únicamente de la aerolínea estatal, con un impacto económico estimado en $2 millones, según Aerolíneas Argentinas.
Los sindicalistas culpan al gobierno por la ruptura de las negociaciones salariales. El conflicto sindical comenzó la semana pasada cuando el gobierno argentino propuso un aumento salarial del 12% que fue considerado insuficiente por los tres sindicatos que agrupan al personal de varias aerolíneas.
La huelga se produce cuando la inflación en Argentina se ha disparado en los últimos meses, en gran parte como resultado de una devaluación del 50% de la moneda local implementada por el gobierno del presidente Javier Milei y la eliminación de subsidios al transporte público y servicios como la electricidad.