Los ministerios de Salud y Educación aconsejaron a los padres que mantuvieran a todos los niños en el interior, ya que se espera que las temperaturas alcancen los 45 grados centígrados.
Advirtieron que a cualquier escuela que se encontrara abierta durante el período de advertencia se le retiraría el registro, pero el comunicado emitido el sábado por la noche no especificó cuánto tiempo las escuelas permanecerían cerradas.
Los ministerios dijeron que continuarán monitoreando la situación e informarán al público en consecuencia.
Sudán del Sur, una de las naciones más jóvenes del mundo, es particularmente vulnerable al cambio climático, con olas de calor comunes, pero que rara vez superan los 40 C. El conflicto civil ha azotado al país del este de África, que también sufrió sequías e inundaciones, lo que dificultó las condiciones de vida de los residentes.
El Programa Mundial de Alimentos, en su último informe sobre el país, dijo que Sudán del Sur sigue enfrentando una terrible crisis humanitaria debido a la violencia, la inestabilidad económica, el cambio climático y la afluencia de personas que huyen del conflicto en el vecino Sudán. También afirmó que en enero 818.000 personas vulnerables recibieron alimentos y transferencias de base monetaria.