El presidente de Rusia, Vladimir Putin, aseguró este jueves que Rusia tiene “con qué responder” al envío de tanques a Ucrania desde Occidente, y advirtió de que no solo será con blindados.
“Nosotros no enviamos tanques a sus fronteras, pero tenemos con qué responder” dijo el jefe del Kremlin en Volgogrado, durante un acto conmemorativo del 80 aniversario de la victoria soviética sobre la Alemania en la batalla de Stalingrado.
La respuesta “no se limitará al uso de blindados”, dijo el jefe del Kremlin, que depositó previamente una ofrenda floral ante la llama eterna en la Sala de la Gloria Militar del complejo memorial “Mamayev Kurgán” y rindió tributo a la memoria de los soldados soviéticos muertos en Stalingrado con un minuto de silencio.
Putin lanzó una advertencia a los que “arrastran a países europeos, incluida Alemania, a una nueva guerra con Rusia” y quienes “esperan ganar a Rusia en el campo de batalla”.
“Por lo visto, no entienden que la guerra moderna con Rusia será completamente diferente para ellos”, afirmó.
Las declaraciones del líder ruso podrían interpretarse como una alusión al poderío nuclear del país del que Moscú y sus dirigentes han presumido en múltiples ocasiones, sobre todo, tras alargarse el conflicto en Ucrania.
A la vez, Putin ha asegurado en varias ocasiones, la última a finales del año pasado, que Rusia “bajo ninguna condición” sería la primera en emplear sus armas nucleares, ya que su doctrina militar prevé tales ataques solo en forma de respuesta.
Con todo, el mandatario ruso hizo especial mención a los tanques alemanes Leopard que Berlín enviará a Ucrania y que también podrán suministrar a Kiev otros países europeos que los tienen en su poder.
“Increíble, pero cierto: nos vuelven a amenazar con los tanques alemanes Leopard”, dijo.
Según Putin, “la ideología del nazismo, ya en su forma moderna, una vez más está creando amenazas directas a la seguridad” de Rusia.
El presidente ruso aprovechó también su intervención para negar el aislamiento de Rusia y asegurar que el país sigue teniendo muchos amigos.
El jefe del Kremlin señaló que “pese a los esfuerzos de la propaganda” occidental, Moscú tiene amigos “en todo el mundo”, incluido en Norteamerica y Europa.
Desde que llegara al Kremlin en 2000, Putin ha asistido en varias ocasiones al aniversario de la batalla que comenzó el 17 de julio de 1942 y terminó el 2 de febrero de 1943 con la capitulación del mariscal del campo Friderich von Paulus, jefe del Sexto Ejército alemán, tras 200 días de lucha sin cuartel.
Según dijo hoy Putin, la disposición de “hacer lo imposible” e “ir hasta el final” por la Patria ayudó a derrotar el nazismo.