En 2023 se duplicó la muerte de mujeres muertas por conflictos con respecto al año anterior, así lo dio a conocer un informe de la ONU que condena las estructuras patriarcales que hacen que la paz sea inalcanzable.
Así lo dio a conocer el informe anual sobre “Las mujeres y la paz y la seguridad” que se publicó recientemente. El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, ha descrito este panorama como sombrío.
“Los derechos adquiridos por las mujeres a lo largo de generaciones están amenazados en todo el mundo, lo que compromete el papel impulsor que el liderazgo y la participación de las mujeres pueden desempeñar en la promoción de la paz”, escribe.
Lamentablemente el poder y la toma de decisiones siguen siendo casi exclusivamente un monopolio masculino, y la acción para acabar con la impunidad de los autores de atrocidades contra mujeres y niñas es inquietantemente lenta.
La primera cifra que destaca el informe es que la proporción de mujeres fallecidas en conflictos armados en 2023 se ha duplicado desde 2022.
Un informe de la ONU anterior, señala que de al menos 33,443 muertes de civiles registradas por la ONU en 2023 en conflictos en todo el mundo, 4 de cada 10 eran mujeres, y 3 de cada 10 eran niños.
“Las mujeres siguen pagando el precio de las guerras de los hombres”, denunció en un comunicado la jefa de ONU Mujeres, Sima Bahous, refiriéndose a “una guerra más amplia contra las mujeres”.
“El ataque deliberado contra los derechos de las mujeres no se limita a los países en guerra, sino que es más mortífero en este contexto”, añadió.
El mundo está sumido en una espantosa espiral de conflictos, inestabilidad y violencia. En 2023 se registraron más de 170 conflictos armados, y unos 612 millones de mujeres y niñas vivían a menos de 50 kilómetros de estos conflictos, un 150% más que hace tan solo diez años, señala el informe de Guterres.
Según datos preliminares de un estudio de ONU Mujeres, de los 50 procesos de paz en marcha en 2023, las mujeres solo representaban el 9.6% de los negociadores, el 13.7% de los mediadores y el 26.6% de los firmantes de acuerdos de paz y alto el fuego (una proporción que se reduce al 1.5% si se excluye a Colombia).
También señala un aumento del 50% para 2023 en el número de casos verificados por la ONU de violencia sexual durante los conflictos.