Varios grupos latinos exigieron una disculpa de la campaña del expresidente Donald Trump, después que uno de los participantes en el mitin del candidato republicano en el Madison Square Garden de Nueva York dijera que Puerto Rico era “una isla flotante de basura”.
Esta queja es específicamente contra el presentador y comediante Tony Hinchcliffe, que fue uno de los más de doce exponentes que antecedieron el discurso del expresidente frente a unos 20,000 simpatizantes en la icónica arena.
En su participación Hinchcliffe dijo que literalmente hay una isla flotante de basura en medio del océano en este momento, creo que se llama Puerto Rico. El comediante también se burló de los latinos y advirtió que disfrutan haciendo bebés.
Roman Palomares, presidente nacional de la Liga de Ciudadanos Latinoamericanos Unidos (LULAC), denunció de inmediato los comentarios y dijo en un comunicado que la campaña de Trump debió haber rechazado y condenado de inmediato las palabras del comediante.
Agregó que la tolerancia de la campaña republicana hacia el humor ofensivo, especialmente contra Puerto Rico y sus residentes, pone de relieve un patrón inquietante de desprecio hacia la gente de la isla y sus desafíos.
Palomares criticó a la campaña y apuntó que el hecho es un anticipo de “lo que se puede esperar” si el expresidente regresa a la Casa Blanca.
Organizaciones como Voto Latino, UnidosUS, Mi Familia Vota, America’s Voice y la Federación Hispana también rechazaron los comentarios del comediante.
El expresidente republicano ha sido criticado por figuras puertorriqueñas como Marc Anthony, que en un reciente anuncio publicitario señaló que no olvida lo que fue la presidencia de Trump y en especial lo que hizo y dijo de Puerto Rico tras el devastador impacto en la isla del huracán María en 2017.