Una rara flor con un olor penetrante como a carne en descomposición se abrió en la capital australiana en la tercera floración extraordinaria de este tipo en el país en pocos meses.

La flor cadáver, también conocida por su nombre científico amorphophallus titanium, floreció por primera vez en sus 15 años en los Jardines Botánicos Nacionales de Australia en Canberra el sábado y se cerraría el lunes, dijo el personal.

Otra flor floreció brevemente en los Jardines Botánicos Reales de Sydney a fines de enero, atrayendo a 20.000 admiradores. Un número similar de personas experimentó otra floración rancia en los Jardines Botánicos de Geelong al suroeste de Melbourne en noviembre.

La flor cadáver o planta cadáver, conocida como bunga bangkai en su Indonesia natal, es endémica de las selvas tropicales del oeste de Sumatra.

Solo florece durante unos días cada 7 a 10 años en su hábitat natural. Su olor rancio atrae a polinizadores como las moscas.

Se cree que solo hay 300 de estas plantas en estado salvaje y menos de 1.000, incluidas las cultivadas.

La directora interina del vivero de Canberra, Carol Dale, dijo que no había una explicación clara para la oleada de floraciones pútridas de Australia.

Una flor se produce cuando la planta ha almacenado suficiente energía en su tubérculo subterráneo conocido como cormo.

“Una de las teorías es que muchas de estas plantas tienen una edad similar, por lo que simplemente han almacenado suficientes carbohidratos en el cormo para finalmente producir una flor”, dijo Dale.

“Todas las plantas de Australia se mantienen en diferentes condiciones, por lo que es inusual que todas estén floreciendo al mismo tiempo”, añadió.

Dijo que Canberra, Sydney y Geelong tenían climas diferentes. Los jardineros utilizaban diferentes regímenes de fertilización en cada planta y diferentes planes de gestión. Dale dijo que después de 15 años sin una floración, decidió que Canberra, donde ocasionalmente nieva, no era el lugar para que prosperara una planta cadáver.

“Ha estado en nuestra colección un poco más de lo que normalmente tardan estas plantas en florecer por primera vez, así que simplemente pensamos que no teníamos las condiciones adecuadas aquí en Canberra”, dijo Dale.

La flor comenzó a abrirse alrededor de la hora del almuerzo el sábado y su olor rancio se deterioró rápidamente.

“El sábado por la noche, era increíblemente penetrante. Podíamos olerlo desde el otro lado de la calle. Definitivamente era digno de asco”, dijo Dale.

Las multitudes atraídas por la flor de 135 centímetros de alto se limitaron a cientos por un sistema de tickets debido a las limitaciones de espacio dentro del invernadero.

Los admiradores compararon el hedor con una variedad de animales muertos, huevos podridos, calcetines sudados, aguas residuales y basura.

Dale dijo que lo peor ya había pasado el lunes. “Recogimos polen hace una hora aproximadamente y cuando estás cerca de la planta, todavía tiene ese olor a carne podrida”, dijo.