El Vaticano afirmó que a pesar de su enfermedad, el papa se sigue manteniendo informado e intentando trabajar, leyendo y firmando documentos, escribiendo y hablando con sus colaboradores.
El papa Francisco, que se encuentra hospitalizado por una neumonía en ambos pulmones, pasó una noche tranquila y se levantó e intentó trabajar, indicó la Santa Sede, un día después de informar de una leve mejoría en su estado de salud.
“La noche fue tranquila, el papa se levantó y desayunó en un sillón”, precisó el Vaticano en un breve comunicado matutino. Francisco ingresó en el hospital Gemelli de Roma por una bronquitis el viernes pasado, pero, la Santa Sede anunció que padecía una neumonía bilateral.
Fuentes del Vaticano afirmaron, no obstante, que pese a su enfermedad el papa se sigue manteniendo informado e intentando trabajar, leyendo y firmando documentos, escribiendo y hablando con sus colaboradores.
La Santa Sede indicó que los análisis de sangre, examinados por el personal médico, muestran una leve mejoría, en particular los indicadores de inflamación.
El anuncio de que el papa sufre una neumonía reavivó la preocupación por la salud del líder de la Iglesia católica. Este diagnóstico es complicado, ya que al jesuita argentino le extirparon el lóbulo pulmonar derecho cuando era joven.
Pese a los reiterados problemas de salud de los últimos años, entre ellos de cadera, dolores en la rodilla que le obligan a ir en silla de ruedas, operaciones o infecciones respiratorias, Jorge Bergoglio ha mantenido una cargada agenda y declaró que no tiene intención de bajar el ritmo. Sus médicos insisten en que tendría que frenar un poco sus actividades.
La inquietud sobre la salud del papa fue en aumento tras la difusión de falsas informaciones en las redes sociales, sobre todo en X, que reportaban la muerte del papa en varios idiomas. Sus colaboradores más cercanos y la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, lo visitaron el miércoles.
Según la mandataria, que estuvo con él unos veinte minutos, el papa estaba alerta y receptivo. Meloni afirmó que incluso bromeó con él. “No ha perdido su famoso sentido del humor”, aseguró la dirigente ultraderechista.
Una fuente del Vaticano indicó que el papa podía levantarse y sentarse en un sillón. Respira sin asistencia mecánica, pero no se descarta que la utilice, por momentos. El papa canceló sus compromisos previstos esta semana, incluyendo una audiencia el sábado y la misa del domingo en la basílica de San Pedro.
Pero todavía no se sabe si pronunciará el Ángelus a mediodía después de la misa del domingo, que estará oficiada por un cardenal.
Frente al hospital Gemelli, multitud de fieles se han acercado para encender velas con el rostro de Francisco, en señal de apoyo, y la Iglesia invitó a todos los católicos del mundo a orar por la salud del papa.
La hospitalización de Francisco, la cuarta en menos de cuatro años, ha relanzado el debate sobre su salud, especialmente porque su ingreso llega al inicio del año jubilar de la Iglesia católica, lo que implica una larga lista de eventos, muchos de ellos presididos por el papa.