Ondeando banderas españolas y catalanas, decenas de miles de personas marcharon por Barcelona el domingo para protestar contra un posible acuerdo de amnistía que los socialistas españoles deben alcanzar por el intento separatista de Cataluña de 2017 si quieren formar un gobierno.
La protesta, organizada por la organización antiseparatista Societat Civil Catalana, tuvo lugar cinco días después de que el primer ministro socialista en funciones de España fuera nombrado para buscar el respaldo de otros partidos políticos para un nuevo mandato.
Pedro Sánchez necesita el apoyo de los partidos separatistas catalanes Junts y Esquerra Republicana de Catalunya, que quieren la impopular amnistía a cambio de votos en el parlamento.
Alberto Núñez Feijóo, líder del opositor Partido Popular conservador, y Santiago Abascal, líder del partido de extrema derecha Vox, asistieron a la marcha que, según la policía, atrajo a 50.000 manifestantes.
“Una amnistía socavaría el poder judicial. Una amnistía pondría al gobierno por encima de la democracia y el Estado de derecho”, dijo Javier Tapia, de 55 años, un trabajador químico.
Sánchez ha defendido su política conciliadora con Cataluña, incluido un indulto en 2021 a nueve líderes encarcelados, y dijo que la crisis de 2017 “no trajo nada bueno”.
La amnistía podría potencialmente cubrir a más de 1.400 personas involucradas en el intento de independencia que llegó a un punto crítico en 2017, estima el grupo catalán pro separatista Omnium. Se trata de una mezcla de personas encarceladas y que enfrentan cargos.
Sería la mayor ley de amnistía en España desde la amnistía general de 1977 por crímenes cometidos durante la dictadura de Francisco Franco, y la primera ley de amnistía aprobada en la Unión Europea desde 1991, según el consejo de investigación del CSIC de España.
Alrededor del 70% de los encuestados, el 59% de ellos partidarios del socialismo, se declararon en contra de la idea de una amnistía en una encuesta realizada a mediados de septiembre.
Si ningún candidato a primer ministro logra la mayoría antes del 27 de noviembre, se deberán convocar nuevas elecciones.