Quién fuera el primer Ministro, Luis Montenegro, presentó su dimisión el martes pasado, afectado por un tema de conflictos de interés.
El presidente portugués recibió a los partidos con representación parlamentaria, al día siguiente de la caída del gobierno de centroderecha de Luis Montenegro, como paso previo a la convocatoria de elecciones anticipadas, según el escenario más plausible.
Montenegro llegó al poder hace casi un año, sin mayoría absoluta, y se ha visto arrastrado por una polémica en torno a un posible conflicto de intereses que afecta de lleno a su familia.
El martes tuvo que presentar su dimisión, al perder una moción de confianza en la cámara, en la que votaron en su contra los diputados socialistas, los del partido de extrema derecha Chega y los de extrema izquierda.
La pelota está ahora en manos del presidente, Marcelo Rebelo de Sousa, que debe reunirse con los partidos.
El secretario general del Partido Socialista, Pedro Nuno Santos, dijo esperar que estos comicios permitirán aportar la estabilidad”, y el líder de la extrema derecha de Chega, André Ventura, comentó que el presidente parecía más bien optar por unas elecciones el 11 de mayo.
Tras dichas consultas, el presidente aguardará el parecer del Consejo de Estado, y a continuación comunicará su decisión.
El jefe del Estado ha dicho ya que trabaja en todos los escenarios. Las opciones que tiene son o bien propiciar la formación de un nuevo gobierno, o bien disolver el Parlamento y adelantar las elecciones legislativas.
Serían en ese caso los terceros comicios legislativos en Portugal desde enero de 2022, y Montenegro ha dicho que volvería a ser candidato.
El dirigente de centro-derecha se ha visto salpicado por varios escándalos. El principal de ellos tiene que ver con una empresa de prestación de servicios, propiedad de su esposa y sus hijos, que tiene contratos con varias compañías privadas. Entre estas figura un grupo sujeto a concesiones estatales.
Desde que trascendieron estas revelaciones, el jefe de gobierno, que ya superó en el pasado dos mociones de censura, anunció que la empresa familiar quedaría exclusivamente en manos de sus hijos.
Pero la oposición siguió insistiendo en que aporte más explicaciones, en el marco de una comisión de investigación parlamentaria cuya creación pidieron los socialistas a inicios de semana.
Esta crisis aumenta la incertidumbre política en un momento en que los riesgos exteriores crecieron de manera significativa, estima la agencia de calificación financiera DBRS Morningstar, que prevé unos resultados parecidos a los actuales, sin una mayoría absoluta en el Parlamento.